Si bien PROINVERSIÓN nos tiene acostumbrados a no ser especialmente ágil, la coyuntura política podría gatillar la ejecución de la licitación de los 90 MHz disponibles en la banda de 700 MHz (45 + 45 MHz) para el primer trimestre del presente año.

Aunque no es posible conocer el precio que los postores estarán dispuestos a ofrecer por los 3 bloques de banda que serán licitados, nos parece que 3 factores inducirán los valores finales: el número de postores, la “limpieza” de la banda y las obligaciones de cobertura.

El número de postores: 4 x 3
En su última edición, la revista Semana Económica reporta declaraciones de PROINVERSIÓN en el sentido de que los 4 operadores móviles existentes han sido pre-calificados como postores.

Si estos 4 operadores presentan oferta económica –el tramo final en la licitación- nos encontraríamos con una situación históricamente excepcional en las licitaciones de telecomunicaciones de PROINVERSIÓN: más postores que adjudicaciones por otorgar.

Una de esas excepciones corresponde precisamente a la también “licitación 4G” de la banda 1 700-2 100 MHz (AWS) en el año 2013, en el que 3 postores (Telefónica, Claro y Entel) pujaron por 2 bloques de banda licitados, lo cual motivó que la suma de los precios de adjudicación a Telefónica y Entel (USD 258 millones) duplicara a la suma de los precios base (USD 127 millones).

Dicho monto de adjudicación equivale a USD 0,11 / MHz per cápita, de modo que si aplicáramos este mismo índice a esta nueva licitación, la recaudación total ascendería a USD 300 millones.

Sin embargo, sabemos que la banda 700 MHz es más valiosa que la banda AWS, porque permite la cobertura de un área geográfica determinada con menos estaciones base (y por tanto con un menor costo), y por tanto es previsible que la recaudación total supere esta cifra (de paso, esta eficiencia operativa permite el despliegue 4G en zonas poco rentables y por tanto no viables con otras bandas 4G).

..Fuente: http://bit.ly/1SMqctY

La “limpieza” de la banda
Este proceso consiste en la migración de la señal de un conjunto de estaciones de TV (sobre todo UHF) que actualmente operan en la banda 700 MHz o contiguas, a otras bandas habilitadas por MTC, para evitar interferencias en la calidad de servicio de los operadores móviles, en perjuicio de los usuarios y la normativa correspondiente de OSIPTEL.

Esta migración irroga costos técnicos (adquisición de equipos) y gastos comerciales y administrativos asociados, cuyo financiamiento es legítimamente requerido por dichas estaciones para proceder con la migración. En el caso de la banda 700 MHz, PROINVERSIÓN ha definido un costo total de USD 10 millones, que será asumido en forma alícuota por los 3 operadores adjudicatarios.

Sin embargo, más inquietante que el monto es la gestión de la migración, pues en los últimos años el Estado Peruano se ha caracterizado por una cultura “sacacuerpo”, por la cual una entidad crea una obligación y luego esa misma entidad u otra obstruyen su cumplimiento, por acción u omisión.

En este caso, la migración es imprescindible para que los operadores móviles presten servicios 4G en la banda 700 MHz, pero la potestad para requerir la migración a otras bandas a las estaciones de TV no la ejercen los operadores, sino el Estado (vía MTC).

Por tanto, es importante que el Estado evite una experiencia similar al caso de Bitel, cuyo inicio de operaciones tardó 2 años desde la adjudicación de la banda 900 MHz, por el prolongado proceso de desactivación de dispositivos que operaban en esa banda (aunque con una dispersión de uso mucho mayor al caso actual, y por tanto operativamente más complejo).

Mientras ello no ocurra, la disposición a pagar de los operadores será severamente afectada, ante la incertidumbre respecto al time-to-market para el inicio de operaciones sobre la banda 700 MHz.

Obligaciones de cobertura
Las licitaciones de telecomunicaciones de PROINVERSIÓN siempre han considerado la obligación de cobertura en un número de localidades no rentables seleccionadas por MTC o FITEL, según sea el caso. En este caso, el Contrato de Concesión diseñado por PROINVERSIÓN para esta licitación considera una lista con más de 100 centros poblados en 19 regiones del país.

En el contexto de mercado actual, consideramos que las obligaciones de cobertura son cada vez menos necesarias, por 2 razones:

1) Red de acceso. El menor costo de la infraestructura en la banda 700 MHz favorece su uso en zonas de bajo consumo (bajos ingresos + baja densidad poblacional); y

2) Red de transporte. Los operadores podrán cubrir el país utilizando la Red Dorsal Nacional de Fibra Óptica (RDNFO) y las redes regionales, diseñada para ofrecer transporte nacional y regional a precios financiados parcialmente con un subsidio del Estado

Es decir, menores costos de transporte y acceso reducen la necesidad de imponer obligaciones a los operadores, cuya existencia reduce más bien su disposición de pago.

En esa medida, conforme más bandas de espectro radioeléctrico sean habilitadas para servicios 4G o 5G, no descartamos que obligaciones de esta naturaleza sean cada vez menos consideradas.

Perspectiva
El escenario más probable es que existan 4 postores por 3 bloques de banda, y por tanto que observemos una puja de precios no muy diferente al caso de la banda AWS, más aún porque su valoración reflejará los menores costos de transporte en que los operadores incurrirán, gracias a la disponibilidad de la RDNFO.

Esto motiva un círculo virtuoso, porque esta mayor recaudación debería precisamente financiar el subsidio comprometido por el Estado en la RDNFO durante los próximos años.

De otro lado, el creciente escenario competitivo debería evitar que la puja de precios prevista empuje al alza los precios de los servicios móviles, y mas bien debería contribuir a que los operadores fortalezcan la oferta de valor a sus clientes en los atributos de servicio más sensibles (calidad de red, oferta de dispositivos, atención de reclamos, plataformas posventa de autoservicio digital, entre otros).

Por último, la expansión 4G prevista en el país para los próximos años (y más adelante en 5G) debería dar pie al desarrollo de servicios digitales privados y públicos de toda índole (incluyendo el despliegue progresivo de un ecosistema M2M), para lo cual debemos todos estar preparados.