Es indudable que para utilizar más y mejor las TIC, es indispensable contar con una adecuada preparación o aptitud. Esto se cumple a nivel individual, de las empresas y del propio Estado. El Índice de Aptitud Articulado (NRI), utilizado por el Foro Económico Mundial y publicado en el Informe Mundial de Tecnologías de la Información 2012 (GITR 2012), muestra cifras preocupantes de la situación en el Perú en los tres niveles antes señalados.

Es pertinente señalar que el grado de preparación o aptitud como se le denomina en el referido Informe, ha sido redefinido para incluir los pilares sobre infraestructura y contenido digital, asequibilidad y habilidades. La idea es que los tres están alineados con áreas clave de políticas de acción que afectan a todos los actores de una economía y miden la aptitud total de un país para utilizar las TIC. Es decir, cuando el Estado logra la mejora de la infraestructura o invierte en desarrollar las habilidades, tanto los individuos como las organizaciones de los sectores público y privado se benefician de ello.

En los siguientes gráficos se muestran los sub indicadores del informe Índice de Aptitud Articulado (NRI) del Foro Económico Mundial, de los países de la región sudamericana que superan al Perú.

Sudamérica, Índice de aptitud articulado (NRI) 2011

(sub-índice)

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En cuanto a infraestructura y contenido digital, Perú supera a Colombia, Ecuador y Bolivia. Este pilar mide entre otros aspectos, la producción de electricidad en Kwh/cápita (puesto 93), el porcentaje de población con cobertura de redes móviles (puesto 75), el ancho de banda por usuario de Internet en  kbps (puesto 80), el número de servidores seguros de Internet por cada millón de habitantes (puesto 77), y la accesibilidad al contenido digital (por ejemplo el contenido de textos y audiovisuales, productos de software), a través de diversas plataformas (Internet de red fija, de red inalámbrica, redes móviles, satelitales, etc.) (puesto 91). Por lo tanto, nuestros puntos más débiles son la producción de electricidad y la accesibilidad al contenido digital.

En cuanto a la asequibilidad, el Perú ocupa el último lugar de Sudamérica. Este concepto considera la tarifa móvil celular (un promedio de diversos tipos de tarifas) (puesto 141, ¡el último lugar de toda la lista de países!), las tarifas de Internet de banda ancha fijo (puesto 110), y el nivel de competencia de los servicios de Internet, de larga distancia internacional, y de telefonía móvil (en donde se tiene el puntaje máximo en una escala de 0 a 2). Es decir, el gran problema que se evidencia es de las tarifas altas, que significan una barrera que obstaculiza la asequibilidad.

En cuanto al pilar sobre habilidades donde únicamente superamos a Paraguay, se incluye la calidad del sistema educativo (puesto 122), la calidad de la educación en matemáticas y ciencias (puesto 135), la tasa de matriculados en educación secundaria (puesto 56), y la tasa de alfabetismo adulto (puesto 89). De ello se aprecia que los aspectos educativos son los más críticos.

En correspondencia con lo anterior, a continuación se muestra un gráfico sobre la utilización de las TIC en el Perú y en la región sudamericana, de los países que nos superan:

América Latina: índice de aptitud articulado. 2012

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Puede observarse que en cuanto a la utilización individual el Perú es el más bajo de los países mostrados. Dicho pilar considera el número de suscriptores de telefonía móvil por cada 100 habitantes (puesto 73), el porcentaje de usuarios individuales de Internet (puesto 76), el porcentaje de hogares con PC (puesto 80), el porcentaje de hogares con acceso a Internet (puesto 80), el número de suscriptores de Internet de banda ancha por cada 100 habitantes (puesto 82), el número de suscriptores de banda ancha móvil por cada 100 habitantes (puesto 62), y el uso de redes sociales virtuales (puesto 79).  Por lo tanto, de los indicadores señalados, el número de suscriptores de Internet de banda ancha así como la disponibilidad en los hogares de una PC y de acceso a Internet, son los aspectos que más influyen en el resultado obtenido.Con respecto al pilar de utilización de las empresas, los indicadores incluidos son la absorción tecnológica a nivel de la empresa (puesto 62), la capacidad para la innovación (puesto 99), el número de postulaciones para patentes por cada millón de habitantes (puesto 88), el grado de utilización de Internet en el negocio (puesto 88), y el grado de entrenamiento del personal (puesto 75). Claramente, el aspecto más influyente es la poca capacidad para innovación, así como las patentes y el uso del Internet en la empresa.Por último, en cuanto al pilar de utilización en el Estado, los indicadores evaluados tienen en cuenta la prioridad que otorga el Estado a las TIC para la competitividad y el bienestar de los ciudadanos (puesto 101), la importancia de las TIC en la visión del Estado (puesto 93), y el índice de servicios en línea del gobierno (puesto 44). Ello refleja claramente que el tema de las TIC no es considerado prioritario y que tampoco forma parte de la visión actual del Estado.En conclusión, existen varios factores que influyen en la baja aptitud y utilización de las TIC en el Perú. Entre ellos destacan aspectos relacionados a insuficiente infraestructura, tarifas altas, deficiente formación educativa, baja penetración de suscriptores y de PC, además de una baja capacidad para la innovación, poco uso de Internet en las empresas.

En tal sentido, la decisión del gobierno acerca de la red dorsal de fibra óptica resulta relevante en el ámbito de la infraestructura. El tema de las tarifas y de la competencia requiere también prontas acciones complementarias por parte de Osiptel. No obstante, lo que resulta más crítico es que el tema de las TIC no forma parte de la actual visión del Estado, algo sumamente preocupante y que exige una nueva actitud de parte del  más alto nivel del gobierno, que permita revertir la situación actual, teniendo en cuenta que las TIC son una herramienta muy potente para la consecución de los objetivos de inclusión social. Ello refuerza nuestra propuesta acerca de la necesidad de una Ley de Promoción de las TIC a nivel nacional.