El uso de teléfonos públicos continuará siendo desplazado por la telefonía móvil, pero no desaparecerá. En el 2T17 el tráfico de voz en los teléfonos públicos cayó 32% interanual. “El negocio está en declive, pero se mantendrá en casos de desastres naturales”, indicó Carlos Huamán, CEO de DN Consultores. Ante ello, los operadores tienen dos caminos: concentrar los teléfonos públicos en bodegas, donde aún hay un uso recurrente, o reconvertirlos para brindar otros servicios. Por ejemplo, la estrategia de Inkacel, OMV que hace poco adquirió Virgin Mobile en el Perú y cuya matriz opera teléfonos públicos, es transformar estos teléfonos en puntos de autorecarga para celulares.
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Artículo original publicado por la revista Semana Económica (05-oct-2017, página 20)
