¿Cómo impactó el ingreso de Entel y Bitel al mercado móvil?
Hasta hace dos años, los únicos competidores en el mercado de telefonía móvil en Perú eran Telefónica y Claro
El saldo de estos dos años es un usuario más satisfecho porque tiene más variedad de servicios con precios más bajos, tanto en las zonas rurales, donde hay mayor cobertura gracias a la estrategia elegida por Bitel, como en la zona urbana, donde Entel incrementó el consumo por usuario. (Foto: AP)
Entel y Bitel han ganado cada uno alrededor de seis puntos de participación en dos años. Un resultado significativo para el mercado de la telefonía móvil, sobre todo si consideramos que los protagonistas son dos operadores recién llegados que se enfrentaron a dos jugadores que tenían el 95% de la torta. Y mayor es el logro si consideramos que entre ambos sumarán cerca del 20% de mercado al cierre de este año, dejando en 80% a los operadores antiguos.
En la historia de las telecomunicaciones peruanas, octubre del 2014 quedará registrado como el hito que marcó el inicio de una intensa guerra, que retóricamente se comparó con David frente a Goliat. Los recién llegados no fueron disruptivos en el sentido estricto, pues sus rivales siempre tenían cómo reaccionar de inmediato con ofertas similares, pero sí fueron agresivos e impactantes, opina Alejandro Jiménez, catedrático de ESÁN.
Ambos retadores partían de circunstancias diferentes y aplicaron estrategias opuestas, pero consiguieron similares avances en participación. La chilena Entel partió con una base de clientes de alto poder adquisitivo (adquirió Nextel, que tenía el 5% de la torta) y ha sumado 6,48 puntos en dos años, llegando a casi 12%. Bitel, en cambio, es una empresa vietnamita que partió de cero y consiguió el 6,8% de la torta, principalmente con clientes prepago de provincias.
Christian Libaque, profesor de la Universidad del Pacífico, considera que si bien la diferencia entre el aumento de Entel y Bitel no es muy grande (0,69 puntos), a largo plazo los resultados pueden ser más favorables para Entel, pues es quien ha marcado la pauta de cada batalla comercial.
A su entender, la chilena tiene una cartera más alta de clientes pospago (35%) que Bitel (7%), lo cual le da un mejor retorno de inversión. Además, y no es poco, tiene frente a la vietnamita la ventaja de poseer más espectro, lo que le permitirá desplegar una red 4G al mismo nivel de calidad que los grandes.
BATALLA TRAS BATALLA
Todo empezó con una lluvia de spots que ofrecían el iPhone a S/9 y convirtieron la primavera del 2014 en una temporada explosiva. Entel llegó con la gama alta subvencionada para quienes migrarán. Sus rivales respondieron de inmediato con lo mismo.
Bitel copó los buses y paraderos ofreciendo Internet móvil a muy bajo precio. También trajeron smartphones a precios más económicos que el promedio. Sus rivales, otra vez, reaccionaron rápido igualando las ofertas.
Entel asegura que en tres meses logró captar el 39% del crecimiento neto del mercado pospago y se convirtió, hasta ahora, en el líder de la portabilidad: ha ganado más líneas (633.109) de las que ha perdido. Sus millonarias campañas publicitarias ganaron varios premios Effie, pero llevaron a la empresa a gastar casi US$150 por nuevo cliente, lo que perjudicó los resultados financieros del grupo chileno.
Al año siguiente se mantuvo el dinamismo y toda oferta tenía su contraoferta inmediata. En marzo Bitel presentó sus económicos paquetes de Internet móvil Mimax y, sin hacer mucho ruido en Lima, fue ganando clientes en zonas nunca antes cubiertas (como poblados de Puno) y sació una demanda insatisfecha. Hoy tiene 2,8 millones de clientes, de los cuales más de dos tercios son del interior.
En las capitales de las principales ciudades la contienda fue muy agresiva. Se pasó primero a una reducción en las tarifas por minuto de llamada a servicios de uso ilimitado. A la batalla de las redes sociales gratis se sumó la de WhatsApp ilimitado y luego Pókemon Go ilimitado. El último capítulo: Entel ofreció duplicar megas y sus rivales respondieron con navegación ilimitada en 4G.
Así las cosas, lo que uno ofrece, el otro lo iguala, mejora u opaca. Se ha generado lo que Carlos Huamán, director de DN Consultores, llama “un circulo virtuoso” formado por las acciones de los retadores, las reacciones de los rivales y la aplicación de algunas políticas regulatorias pro competencia, como acelerar la portabilidad, abrir la venta de equipos desbloqueados y la polémica regulación de los cargos por interconexión.
El saldo de estos dos años es un usuario más satisfecho porque tiene más variedad de servicios con precios más bajos, tanto en las zonas rurales, donde hay mayor cobertura gracias a la estrategia elegida por Bitel, como en la zona urbana, donde Entel incrementó el consumo por usuario.
Para los analistas la guerra aún está lejos de tener un ganador. Los precios de Internet móvil todavía pueden bajar más, falta verlos recuperar sus inversiones y hay casi un 33% de población, según GSMA, sin teléfono móvil. Los retos, para ambos, aún siguen siendo de alto calibre
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