Después de casi dos meses de reuniones, el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) aún no ha recibido respuesta de la mexicana Azteca Comunicaciones sobre la tarifa a colocar en la Red Dorsal de Fibra Óptica, la infraestructura que permite el traslado de la Internet por todo el país. Esto pone en juego la Internet para 180 ciudades.
La directora de Concesiones de Comunicaciones del MTC, Nadia Villegas, comentó a Gestion que hasta el momento no hay comentario de la empresa. Asimismo, se tienen versiones en el mercado que sugieren un cambio y posible salida de Azteca Comunicaciones del país. Sin embargo, hasta el momento no existe una versión oficial de la empresa y lo que se conoció es que Azteca habría realizado recortes en sus costos.
¿Sin Internet en provincias?
Nadia Villegas precisa que las operaciones, ni los planes de la ampliación de la red regionales deberían verse afectados. “El tema sobre la tarifa ya fijada no afecta la continuidad o el servicio ya brindado”, remarcó.
Lo que sí es cierto es que el costo de operación y mantenimiento lo tendrá que asumir Azteca, lo que pone en alerta la continuidad de la Red Dorsal.
Antecedentes
La Red Dorsal es como la columna vertebral para el traslado de la Internet a nivel nacional, sobre la base en la que se instalarán las redes regionales para la atención de los operadores que la requieran.
Su infraestructura se completó en julio del 2016, a cargo de Azteca, llegando a 180 ciudades del interior del país y 23 capitales de regiones, sin llegar al usuario final. Sus clientes son las empresas operadoras.
Alternativa
Una opción para viabilizar la Red Dorsal de Fibra Óptica estaría en privatizar aquellas áreas que tengan alta demanda en el uso de Internet. El CEO de la consultora tecnológica DN Consultores, Carlos Huamán señaló que el actual modelo de negocio de la Red Dorsal intenta aplicarse a dos realidades distintas y que el problema no es un tema de tarifas. Para tal efecto, el experto señaló que la privatización de la Red Dorsal en zonas de alta competencia responde a mercados económicamente viables; mientras que la oferta de Internet en zonas de baja demanda debería operar bajo subsidio del Estado, sin que afecte la actividad de las operadoras telefónicas.
Contexto
Sin embargo, antes que se desarrolle dicho medio, los operadores de telefonía ya habían extendido parte de la red de fibra óptica en algunas regiones y localidades, lo que dejó con menos posibilidades de captar clientes, menos de 30 hasta el momento.
Actualmente con una tarifa fija de US$ 23 por megabyte por segundo (Mbps) compite con la oferta de hasta US$ 6 que existe en el mercado. Según fuentes del sector, hubo un error en el cálculo de los costos de la empresa mexicana, debido a que el mayor impacto se mantiene en el costo de mantenimiento de la Red Dorsal. “Se enfrenta continuamente a los cortes de cable y eso al parecer no fue estimado por la empresa”, expresaron.
Contingencias
Ante ello, la empresa propuso una reducción de la tarifa, para la captación de nuevos clientes, y obtener mayores ingresos. El problema fue enfrentado con una propuesta del Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), a sugerencia del Osiptel, de que la empresa tenga una tarifa flexible sobre los US$ 23 por Mbps.
Aunque operadores de telefonía han señalado que no debería existir un subsidio a la tarifa, ya que ello generaría una competencia desleal.
Artículo original publicado por Gestión p.4